Olivares de Duero

Con Garmón, la familia García apuesta por una viticultura ancestral minifundista, de viñas viejas, poco vigorosos y clones autóctonos, situados en zonas ribereñas más altas, frías y continentales con un ciclo más largo de maduración y vendimia más tardío. Estos factores condicionan la idiosincrasia de un negro elegante y jugoso, de imponente y refinada expresión frutal.